Pregunta: “�Qu� dice la Biblia sobre los hermanos?”

Respuesta:


topreadz.com/Espanol



Pregunta: “�Qu� dice la Biblia sobre los hermanos?”

Respuesta:
Los hermanos son mencionados muchas veces tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. Algunos de los hermanos m�s famosos que encontramos son Ca�n y Abel (G�nesis 4:1-8); Jacob y Esa� (G�nesis 25:19-27); Jos� y sus once hermanos (G�nesis 37); Mois�s, Aar�n y Miriam (N�meros 26:59); Pedro y Andr�s (Mateo 4:18); y Marta, Mar�a y L�zaro (Juan 11:1).

El amor entre hermanos deber�a ser algo natural, y la Biblia utiliza ese amor phileo como ilustraci�n del amor entre creyentes. La Biblia nos ordena que nos amemos unos a otros en la familia de Dios de la misma manera que amar�amos a un hermano o hermana: “Amaos los unos a los otros con amor fraternal” (Romanos 12:10). Pablo expres� su amor por los santos de Filipos de esta manera: “Hermanos m�os amados y deseados, gozo y corona m�a” (Filipenses 4:1).

Lamentablemente, no todos los hermanos expresan su amor mutuo. Muchos de los famosos grupos de hermanos mencionados anteriormente son conocidos por sus conflictos interpersonales e incluso por su odio mutuo. Ca�n mat� a Abel por celos, cometiendo as� el primer asesinato (G�nesis 4:3-8). Jacob y Esa� estuvieron enfrentados desde el vientre materno y hasta que fueron adultos (G�nesis 25:23; 27). Los hermanos de Jos� lo vendieron como esclavo en Egipto (G�nesis 037:12-28). Incluso la historia de Marta y Mar�a contiene un desacuerdo entre las hermanas (Lucas 10:38-42).

El propio Jes�s ten�a hermanos: Santiago, Jos�, Sim�n y Judas, y un n�mero desconocido de hermanas (Mateo 12:46; 13:55, 56). Jes�s utiliz� una vez a su familia como imagen de Su relaci�n con Sus seguidores: “Mientras �l a�n hablaba a la gente, he aqu� su madre y sus hermanos estaban afuera, y le quer�an hablar. Y le dijo uno: He aqu� tu madre y tus hermanos est�n afuera, y te quieren hablar. Respondiendo �l al que le dec�a esto, dijo: �Qui�n es mi madre, y qui�nes son mis hermanos? Y extendiendo su mano hacia sus disc�pulos, dijo: He aqu� mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que est� en los cielos, �se es mi hermano, y hermana, y madre” (Mateo 12:46-50).

Al decir esto, Jes�s no estaba faltando al respeto a Su familia ni diciendo que no fueran importantes. M�s bien, estaba comparando una estrecha relaci�n familiar con el v�nculo que �l comparte con todos los que creen en �l. De hecho, el v�nculo de Jes�s con los creyentes es a�n m�s fuerte, ya que no se ve empa�ado por los celos, la ira, la frustraci�n o los desacuerdos.

Entonces, �qu� podemos aprender de los ejemplos b�blicos sobre los hermanos? Es importante entender que el conflicto entre hermanos no forma parte del plan de Dios para la familia. Aunque Dios finalmente us� cada situaci�n para hacer Su voluntad, el conflicto entre algunos de estos hermanos caus� celos asesinos, dolor, guerras y familias destrozadas.

Hay algunos principios que se pueden aplicar a cualquier relaci�n. En primer lugar, debemos amar a los dem�s de manera que refleje el amor �gape de Cristo: “Amados, am�monos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor” (1 Juan 4:7-8).

En segundo lugar, debemos mostrar bondad hacia los dem�s, tratando a los que nos rodean como queremos que nos traten (Efesios 4:32; Lucas 6:31). Esto significa que no s�lo debemos responder amablemente cuando nuestros hermanos se enfaden o nos acusen, sino que tambi�n debemos esforzarnos por servirles (Juan 13:12-14).

Por �ltimo, Pablo instruy� a los creyentes para que “est�n en paz con todos los hombres” (Romanos 12:18), evitando las discusiones y los conflictos y jugando el papel de pacificadores cuando surjan desacuerdos en nuestras familias.

©

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Scroll to Top