Pregunta: “�Por qu� es importante tener convicciones propias?”

Respuesta:


topreadz.com/Espanol



Pregunta: “�Por qu� es importante tener convicciones propias?”

Respuesta:
Una persona con convicciones propias est� convencida de que algo es cierto y se mantiene en sus principios, independientemente de la situaci�n y de las consecuencias. Las convicciones propias dicen mucho sobre qui�n es una persona.

Tener convicciones propias es importante para no dejarse llevar por las opiniones de los dem�s ni obedecerlas autom�ticamente. Una persona sin convicciones propias ser� indecisa y se dejar� llevar f�cilmente. Cuando la multitud dice: “Desobedezcamos todos a Dios”, es preciso que alguien con convicciones propias se levante y diga: “No”. Sadrac, Mesac y Abed-nego ten�an sus propias convicciones en contra de la adoraci�n de dioses falsos, y se mantuvieron firmes frente a la avalancha babil�nica, incluso ante la ira del rey (Daniel 3).

Todo el mundo tiene opiniones y preferencias, pero una persona con convicci�n no forma sus ideas bas�ndose en deseos ego�stas o para obtener un beneficio propio. Una persona con convicciones propias ha reflexionado sobre los temas y vive con un prop�sito. Esas personas est�n seguras de lo que creen y est�n convencidas de las cosas que son m�s importantes. El ap�stol Pablo esperaba un tiempo en el que los creyentes alcanzar�an la madurez espiritual: “para que ya no seamos ni�os fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para enga�ar emplean con astucia las artima�as del error” (Efesios 4:14). Parte de la madurez es tener un convencimiento personal suficiente para reconocer y resistir las falsas ense�anzas del d�a.

Las convicciones propias se deben formar utilizando la Biblia como norma. Deber�amos tener una convicci�n personal a favor de lo que la Biblia promueve. En cuanto a lo que la Biblia proh�be, debemos tener una convicci�n personal para no hacerlo. De este modo, la Palabra de Dios informa a nuestra conciencia y es una luz para nuestro camino (Salmo 119:105). Las convicciones personales nunca deben basarse �nicamente en lo que “sentimos” sobre algo: “Los que conf�an en s� mismos son tontos”: “El que conf�a en su propio coraz�n es necio; mas el que camina en sabidur�a ser� librado” (Proverbios 28:26).

Por supuesto, la Biblia no trata directamente todas las situaciones. La formaci�n de convicciones propias sobre cuestiones no especificadas en las Escrituras requiere que busquemos los principios que nos gu�an en la Palabra (2 Timoteo 3:16-17; Santiago 1:5). La Biblia no menciona el aborto en s�, pero s� habla claramente de asuntos como el asesinato y la protecci�n de los inocentes. Cuando estudiamos y nos sometemos a la Palabra de Dios, aprendemos lo que Dios dice sobre lo que est� bien o mal (Hebreos 5:14). A medida que crecemos en sabidur�a y criterio, nuestras convicciones personales se alinear�n con las cosas que son excelentes para Dios (Filipenses 1:9-11; Romanos 12:1-2).

Ya que estamos tratando con convicciones propias, hay algunos asuntos en los que diferentes creyentes pueden tener convicciones distintas. No todos los asuntos son blancos o negros, y no todos los asuntos pueden ser rastreados a una directriz b�blica. En tales casos, debemos dejar que la ley del amor gobierne. Pablo nos dice que no discutamos “sobre opiniones” (Romanos 14:1), como el consumo de ciertos alimentos o la consideraci�n de un d�a como m�s sagrado que otros. Debemos tener convicciones propias: “Cada uno est� plenamente convencido en su propia mente” (vers�culo 5), pero tambi�n debe dejar espacio para las convicciones de los dem�s: “�T� qui�n eres, que juzgas al criado ajeno? Para su propio se�or est� en pie, o cae. . . . El que hace caso del d�a, lo hace para el Se�or; y el que no hace caso del d�a, para el Se�or no lo hace. El que come, para el Se�or come, porque da gracias a Dios; y el que no come, para el Se�or no come, y da gracias a Dios” (vers�culos 4 y 6).

Las convicciones personales son importantes porque nos ayudan a mantenernos firmes cuando este mundo es incierto y cambiante. Necesitamos m�s hombres y mujeres con un “pilar moral” en medio del caos moral que nos rodea. Las convicciones personales nos mantienen firmes y nos recuerdan lo que m�s importa. Nos ayudan a soportar la tentaci�n sin comprometernos. Afinan y prueban nuestra fe.

©

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Scroll to Top